Salón de banquetes en el cielo (noviembre de 1975)

Jesús introduciendo las 144.000 personas justas

Jesús me mostró el Salón de Banquetes del Cielo en la visión. El techo de la sala del banquete era en forma de cúpula y el interior estaba lleno de 144.000 asientos. Cada silla era considerablemente grande, delante de ella había mesas con una placa de identificación. Frente a los numerosos tronos blancos, Jesús llamó sucesivamente a la plataforma cada uno de los profetas y los santos de la Tierra. Jesús, entonces, presentaba uno por uno sus historias, sufrimientos y tribulaciones de toda la vida en el servicio a Dios. Mientras él hablaba, una pantalla gigante mostraba estas mismas escenas. Cuando Jesús los presentó con la alabanza, los profetas y los santos se acordaban de sus sufrimientos terrenales. Ellos rompieron a llorar al darse cuenta de que debido a la gracia de la sangre del Señor y sus propios sacrificios, por fin podían disfrutar de la felicidad eterna y la bendición de los tronos gloriosos. Al observar esta escena en la plataforma junto a Jesús, yo también me conmovía profundamente y finalmente se me salían las lágrimas. El Señor secó las lágrimas del profeta sollozante y dijo: “Todo está hecho. Disfruta de tu bendición eterna”. Dos ángeles se le acercaron y lo guiaron a su trono que tenía su placa de identificación. Después de esta visión, abrí los ojos y me sentí aturdido por algún tiempo. Cuando llegue a ser plenamente consciente, me di cuenta de lo grandioso del mundo espiritual que se iba a desarrollar.